El roguelike de estrategia por turnos te enfrenta a un pandemónium purgatorial cada vez más extraño.
Bien, esta es la configuración de Brutal Orchestra: Estás muerto, alguien te ha matado, y no puedes hacer nada para escapar del purgatorio, pero definitivamente puedes prepararte para la venganza cuando lleguen aquí también.
Formando un grupo de otros 20 extraños desechos del inframundo, te guiarán a través de un paisaje del purgatorio inspirado en las extrañas pinturas de Hieronymous Bosch y Pieter Bruegel, en las que los demonios son peces dentro de un traje de piel humano o tienen trompetas en el trasero, y honestamente esas son las ideas mucho más tranquilas que hay aquí.
Es un sistema de batalla táctico y estratégico, en el que mueves a los personajes entre cinco posiciones para atacar o evitar ataques, intentando conseguir enfrentamientos óptimos con las cinco unidades de tus enemigos. Todo el sistema se alimenta de pigmento, la sangre y/o vísceras viscosas de tus enemigos. Cada habilidad del personaje cuesta pigmento de una determinada combinación de colores, y se obtiene más pigmento al golpear a los enemigos cuya barra de salud es de ese color.
Lo bueno de este sistema es que puedes meter la pata matando a los enemigos en un mal orden, dejando a algunos de tus personajes sin poder conseguir más recursos para actuar. También puedes quemarte el maná, ya que tener demasiado pigmento provoca daños cuando actúas.
Está totalmente lanzado y bastante pulido. Sólo he pasado unas horas con él, pero puede que sea mi nueva obsesión roguelike. Puedes encontrar Brutal Orchestra en (Steam) y en (itch.io).