Inicialmente alabado por el buen juego, pocos bichos y sobre todo ningún tramposo, los actuales desarrollos de Call of Duty:Warzone apuntan en otra dirección.
En los últimos dos días, los informes sobre tramposos en Warzone se han multiplicado exponencialmente. Mientras que en el lanzamiento del juego no parecía haber ningún lobby donde la gente jugara injustamente, ahora una gran parte de los partidos parece estar afectada.
También los torneos se ven afectados
En el «Miércoles de la Zona de Guerra», un evento organizado por Youtuber KEEMSTAR, también hubo varios incidentes. El torneo se trata de conseguir la mayor cantidad de eliminaciones en dos rondas de Warzone.
Molesto sólo cuando un escuadrón entero es asesinado por tramposos en una de las rondas. Esto sucedió por ejemplo al equipo alrededor de ProSyndicate, que perdió las semifinales por esto.
Clearly hackers have taken over Warzone.
Unfortunately we simply don’t have the manpower to investigate each individual case when a player is killed by a hacker. So we can’t grant those teams a restart.
COD needs to fix this or Warzone will die in a week. JS
— KEEM 🍿 (@KEEMSTAR) April 1, 2020
El desarrollador quiere abordar los problemas
El pabellón del Estudio Infinito (IW) ya es consciente de los problemas. En una declaración oficial explican sus medidas para contener la epidemia de trampas.
Cheaters not welcomed in Call of Duty: Warzone. Here's what we're doing about it. https://t.co/3gASGH1xpy pic.twitter.com/k5lVOI2TZz
— Infinity Ward (@InfinityWard) March 31, 2020
Pero eso no es suficiente para muchas personas: Según el jugador de 100 Ladrones, Matthew «Nadeshot» Haag, no es en absoluto suficiente con que los casos denunciados sean revisados manualmente.
Y tiene razón: Según la declaración de IW, los promotores siempre revisan los casos ellos mismos. Sin embargo, para un juego con una base de jugadores tan grande, hay que encontrar otra solución que ya busque trampas en el lado del cliente.
Otros juegos de Battle Royale como Fortnite y PUBG ofrecen enfoques similares: Servicios como Easy Anti-Cheat o Battleye comprueban el código directamente en los ordenadores de los jugadores. Si IW no consigue controlar los problemas, hacer trampas podría enviar a la base de jugadores de vuelta a los competidores.